“Miedo profundo” vuelve a enfrentar al tiburón pero esta vez con una heroína surfista

Eduardo Chapellín.- Steven Spielberg saltó con todo a la palestra del cine con una cinta, que muchos daban que no pasaría de la denominada serie B, pero fue uno de los taquillazos del año 1975. Igualmente el tema instrumental de esta producción quedó grababa en el imaginario popular por su acuciante ritmo de suspenso. Se trató de “Tiburón”. Secuelas y varias versiones del tema del ataque de los escualos se han filmado en distintas épocas. Unas con éxito y otras que ni quienes actuaron se acuerdan del nombre de las mismas.

Ahora en este 2016 le toca a “Miedo profundo” (The Shallows), un nuevo film en la que una joven debe enfrentarse a una de las criaturas más temidas del mar. La película fue dirigida por un español, Jaume Collet-Serra, y escrita por Anthony Jaswinski.

La historia gira sobre Nancy Adams (Blake Lively), quien surfea en una playa escondida en México, cuando se encuentra en el área de alimentación de un enorme tiburón blanco. Aunque la separan sólo 200 yardas de la playa, la sobrevivencia será la última prueba de su valor y requerirá toda la inteligencia, los recursos que encuentre y la fortaleza tanto física como emocional.

“Esta película te impacta en un nivel primario”, señaló a los medios de comunicación su protagonista Blake Lively, quien interpreta a la joven estudiante de medicina atrapada a corta distancia de la playa, luego de ser atacada por un gran tiburón blanco: “Se trata de la voluntad de sobrevivir, el brío de no darse por vencida. Cuando leí el guión imaginé, ‘¿Qué haría yo en esta situación?’ La forma en que Nancy pelea para subsistir es bastante increíble”.

En lo que se refiere al otro protagonista de la historia, el temido tiburón blanco, el director Jaume Collet-Serra imaginó un adversario pasmoso que mantuviera a los espectadores al borde de sus asientos: “Mi interés está en presentarlo como una fuerza de la naturaleza. Mi razonamiento es que si Nancy no puede ver bien al tiburón, entonces el público tampoco debía verlo bien”.

En líneas generales, la cinta destaca por el manejo de lo último en tecnología con una historia sencilla y predecible pero que es coherente, a excepción del final, destacando el manejo de la tensión a la hora de que la protagonista debe resolver situaciones extremas contra su poderoso adversario.

También tiene puntuación sobresaliente la dirección de fotografía, a cargo de Flavio Labiano. En cuanto a la actuación de la protagonista Blake Lively, la misma presenta muchos altibajos pero es aceptable. Lamentablemente, y como le pasó a sus predecesoras que no pudieron destronar a la primera de Spielberg: el final todo lo sabemos, quizás por lo que muchos esperaban que al final se impusiera el mortífero escualo. Cuestión de gustos, pero los efectos en cuanto al surfeo y las tomas acuáticas son de primera y valen la pena verlos.